Hotel L'Abbaye 4*
Servicios principales
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Wi-Fi gratis
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Servicios 24 horas
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Entrada/Salida exprés
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Piscina
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Comida/Bebida
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Salas de reuniones
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Agradable para niños
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Aire acondicionado
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Mascotas
Ubicación
El Hotel L'Abbaye Saint-Cyprien, de 4 estrellas, se encuentra a tan solo 150 metros de Chateau, y a tan solo 1 km de Chateau de Fages. El hotel cuenta con un restaurante tradicional francés que sirve cocina francesa y está situado cerca del Eglise de Saint Cyprien.
Este hotel está a 5 minutos a pie del centro de Saint-Cyprien. Este alojamiento ofrece a los amantes de la historia la proximidad a Chateau de la Roque ( 2 km) y a Chateau de Monsec ( 2,1 km). El Musée La Rue du temps qui Passe se encuentra a una distancia de 4 km del hotel. Para los que viajan desde lejos, el aeropuerto Bergerac Roumanière está a 58 minutos en coche.
El hotel L'Abbaye Saint-Cyprien cuenta con 22 habitaciones y algunas disponen de Wi-Fi y televisor de pantalla plana, y comodidades como cortinas opacas y climatizador. Las habitaciones disponen de un cuarto de baño privado equipado con secador de pelo y ducha a ras de suelo. La mayoría de las habitaciones ofrecen vistas al jardín.
Cada mañana, el L'Abbaye sirve un desayuno continental. Este lugar invita a los huéspedes a disfrutar de una copa en su bar lounge. El restaurante La Lagune se encuentra justo al lado de este establecimiento.
Reseña de un crítico de hotel
Recientemente tuve la oportunidad de disfrutar de un fin de semana en el encantador Hotel L'Abbaye en el corazón del pueblo de Saint Cyprien. Desde que llegamos, el ambiente acogedor y la atención del personal nos hicieron sentir como en casa, destacando la dedicación de cada integrante para crear una experiencia de tranquilidad. El desayuno fue un verdadero deleite, con café recién preparado y deliciosos croissants a las 5:30 am para comenzar nuestro viaje de manera espectacular. Las instalaciones son simplemente maravillosas: un jardín bello y una piscina al aire libre que dan ganas de quedarse todo el día haciendo nada. La decoración es una mezcla exquisita de lo antiguo y lo moderno, lo que refleja el cariño puesto en la renovación del edificio del siglo XVIII. Sin duda, regresaré a este refugio para degustar más de su oferta culinaria. ¡Una joya en el Périgord Noir!
